stás en: LA INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS

QUIÉN hay detrás

QUÉ hay detrás

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Pgs. 1    2    3    4     5    6    7    8    9  

Siguiendo con la lectura de Freud compruebo más adelante que mi ocurrencia tiene sentido al ver cómo nuestro autor remacha: ”La labor anímica que se desarrolla en la formación de los sueños se divide en dos funciones: establecimiento de las ideas latentes [en primer lugar] y transformación de las mismas en contenido manifiesto [a continuación].”

Tuve este productivo y variado sueño c. 1990 y lo conservo registrado con todo detalle en unas hojas que guardo precisamente entre estas páginas del libro que ahora me ocupa. El sueño se produjo dos días antes de que yo leyera por primera vez este capítulo sobre la representabilidad de los sueños, y tiene varios bloques cuya conexión renuncio a acometer ahora.

No todo el material del contenido manifiesto está puesto en conexión con las ideas latentes, sino sólo el que es más importante, queda más claro y comporta menores complicaciones, a fin de no alargar en exceso el ejemplo que tomo como cuidado de la representabilidad.

IDEAS LATENTES

1er bloque del sueño


Yo he compartido mesa con el Profesor Gª Velarde en una reciente conferencia que di en el Ateneo (sala de conferencias).

Este profesor nos dijo que estaba en contacto con miembros de la Royal Society de Londres para traerlos, incluyendo algún Premio Nobel, a dar conferencias en Madrid.

El título de mi conferencia era Ciencia, técnica y humanidades.

JC y yo participamos juntos en el Tercer Congreso Nacional de Ingenieros Electromecánicos de 1976. Él era el responsable del Marco Corporativo y yo del Tecnológico.

A la sazón GG era mi jefe en la fábrica donde yo trabajaba.







2º bloque

     P ha tenido recientemente dos serios accidentes de coche; en el último tuvo siniestro total y hubo de comprarse otro coche.







3er bloque




Hace poco he traducido una conferencia en inglés dictada en la Universidad a Distancia por el pensador Edward de Bono.

Más recientemente me he ofrecido a AM (sacerdote responsable de inmigración en la Diócesis de Madrid) para traducciones español / inglés / francés.



En los años 1954 / 55 yo vivía, de estudiante, en el Colegio Mayor que actualmente es sede del rectorado de la Complutense.

Al volver de clase un día me encuentro con que en él están rodando la película La ciudad de mis sueños (el tema, la vida de estudiantes en la Ciudad Universitaria).

De ella recuerdo una escena que me chocó: se desarrolla en una habitación del Colegio Mayor de forma que alguien acaba abriendo la ventana para ver el exterior, de tal manera que lo que aparece justo a continuación es la fachada del propio Colegio Mayor.

Era la manera de hacer ver que la habitación, despersonalizada, estaba asociada, en la distancia, a un edificio universitario emblemático.



En 1981 presenté mi audiovisual Museo de la Forja, la verja y la filigrana cuya primera diapositiva es el herraje forjado dentro de un hueco redondo; tiene la particularidad de ser de modo radial y no matricial como la mayoría de las rejas que tengo coleccionadas. Es muy bella y está en el Colegio de Ingenieros de Caminos.


En 1989 había compuesto el soneto Invierno por la tarde en el que revivo un atardecer en el cauce estrecho del Eresma al pie de Segovia poniendo en contraste la naturaleza, bien antigua, con las edificaciones tan sólo viejas, pero de excelente factura.

El lugar y lo emotivo del momento me impresionaron tanto que me vi llevado a terminar así el soneto:

Prefiero compartir lo que se pueda

con el río, la tarde y mis canciones.




CONTENIDO MANIFIESTO

1er bloque del sueño


Estoy en el teatro (que puede ser el salón de actos principal del Ateneo) en un acto público. Quien preside, Rodríguez Sahagún (alcalde de Madrid), o Gª Velarde o un Premio Nobel de algo, comunica que alguien (tal vez JC) ha dicho sobre la técnica algo que yo no alcanzo a percibir.

Mientras eso era dicho por JC, éste se ponía su corbata sobre el hombro como acompañando con el gesto la idea de excelencia que estaba expresando.

El que preside está muy arriba y yo muy abajo y cerca, de forma que tengo que inclinar mucho la cabeza hacia atrás.

Entonces yo grito: “GG! Que lo diga el propio JC!”

Y éste dice: “La técnica es buena para aplicarla como bien social”.

Yo, pensando que la gente podía haberlo interpretado al revés (la técnica es tan suprema que sólo se puede emplear de manera elitista) intento gritar mi observación, pero una música de fondo como de percusión in crescendo, no me deja.


2º bloque

     Estoy como en una marina y veo venir una lancha a motor muy rápida que, con gran dificultad toma la curva frente a mí al acercarse a tierra.

CORTE

     Vamos con P en un coche; al tomar una curva no puede hacerse con él y se estrella. El coche se destroza por completo pero a nadie le pasa nada. P sale tan tranquilo y nos dice: “Esperadme aquí un momento que voy a comprarme otro”.


3er bloque

     Estoy en una institución a la hora de comer. Me falta tiempo para coger los platos del autoservicio y tengo la tentación de tomar uno apetitoso dejado en la mesa de alguien que ha ido a por algo que le faltaba. Parece que esa misma operación la habían hecho otros antes.

              De pronto aparezco con un señor importante que me conduce a una habitación apartada donde sobre una mesa me muestra un libro escrito en francés para que se lo traduzca.

     Es un libro medio piadoso (igual que mi interlocutor), medio de arte, que está tal vez sin terminar.

     Me pregunta si seré capaz de traducirlo en 12 años. Yo lo miro, veo que tiene algunas palabras en francés extraño (le pregunto si no será patois) y le digo que en un año, claro que las palabras más raras las dejaré sin traducir.

     En el libro aparece la imagen de una de las ventanas de la habitación en que estamos que, curiosamente, no se puede ver desde dentro: tenemos que salir afuera para comprobar su existencia. Al salir a la calle y verla observo que tiene un detalle que está referido en el texto de manera que ni en español soy capaz de comprender.

[Conservo en mi memoria la imagen que vi en el sueño y además la tengo dibujada en el papel donde lo registré: Se trata de dos huecos redondos pegados entre sí, con rejas radiales y algunos aditamentos -el detalle referido en el texto que acabo de mencionar-]

     Cuando salgo al exterior para hacer esa comprobación contemplo el lugar:

     Estamos abajo, como en un collado con árboles junto a un río y en lo escarpado de enfrente se alza el pueblo que a su derecha muestra en alto su exterior muy natural y a su izquierda el interior con edificios de piedra de sillería clásicos y muy bien mantenidos. Algo así como el palacio de los Condes de Gómara o la plaza de Morón de Almazán.

     Al pie del pueblo y muy a lo lejos se ve en la cuesta a una multitud como en procesión en la que se advierte que CH ha abierto un paraguas para taparse con él. Aunque la distancia impide el detalle, mi acompañante se dirige a las gentes con un saludo de su mano. Yo contemplo la escena de gran belleza natural (descarto a la multitud) con lágrimas en los ojos provocadas por un transporte estético. Me despierto con lágrimas reales.