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Pero empezando a trabajar en una solución nueva que conservando el tubo de cobre iba a suponer un gran ahorro y una innovación muy especial. Hasta entonces un TAE era representado en los planos como si fuera el buje de una rueda o el bloque de un motor, con lo que resultaban planos muy extensos, complejos y con escasa utilidad.


La singularidad de un TAE se materializa en que lo único que requiere para una perfecta definición,

es expresar mediante un tabulado, su:

- Longitud recta del tubo de partida.

- Diámetro exterior del tubo y grueso de su pared.

- Longitud de los tramos rectos.

- Radio de las roldanas necesarias para el conformado.

- Sucesivos ángulos de quiebro α (grados a la derecha o a la izquierda).

- Sucesivos ángulos de plano β (grados a la derecha o a la izquierda).


El tabulado ocupa menos espacio que el sello del plano y da más información, con mayor precisión, menor riesgo de confusión y de forma más práctica y sencilla. Además permite registrar las posibles modificaciones ulteriores que se necesiten, fabricar prototipos o producir grandes series con máquinas programables sin olvidar un control cómodo y eficaz. Los vértices que se muestran en el tabulado de un TAE han sido diseñados para que ocupen, con precisión, su lugar en el chasis del camión.


Se compró una máquina conformadora de nuestros TAE y con ella se fabricaron Kms. de tubos tabulados. Yo escribí un tratado TAE completo que deposité en la Biblioteca Nacional con Código de Barras 1846516-1001. Lo traduje al inglés y se lo hice llegar a Chrysler UK.


LA CALIDAD BIEN ENTENDIDA EMPIEZA POR UNO MISMO


Éste es el título que Renault Vehículos Industriales había propuesto para que la plantilla participara en un concurso de artículos impulsores de la Calidad en nuestra Empresa. Lo que sigue fue mi aportación como responsable de Ingeniería de Calidad.


Tal vez hay quien piensa que la calidad empieza cuando nos lo manda el jefe o cuando hay un papel que lo exige o, simplemente que la Calidad hay que dejarla para cuando tengamos tiempo. Algo así como si la Calidad fuera una cosa que se pudiera añadir desde fuera. Y no es así. La Calidad es algo que debe empezar desde dentro de nosotros mismos, de todos, desde el primero al último.


Definida en sentido negativo la Calidad viene a ser la repugnancia que uno debe sentir hacia algo mal concebido, mal hecho, mal controlado o sin control. Es importante entender que el enriquecimiento personal en la Calidad viene de la crítica en común de quien concibe, ejecuta y verifica.


Estamos todos tan acostumbrados a ser criticados desde los campos de los demás que se nos ha olvidado la sana práctica de criticarnos a nosotros mismos, primero.

Si todos fuéramos más rigurosos con nosotros, sobraría el rigor de los demás y nuestras relaciones serían más amables.


Había un sofisma ético que proclamaba : “la caridad bien entendida empieza por uno mismo”. Y llamo sofisma a este adagio porque iguala egoísmo y altruismo que, evidentemente, son cosas contradictorias.

Pues bien, si no somos capaces de hacer de la Calidad un imperativo moral, la necesidad de supervivencia, es decir, nuestro egoísmo, nos obligará a ello. Está claro que de cualquier manera nuestro futuro pasa por la calidad del trabajo de todos nosotros: aceptemos el reto de buen grado mejor que a la fuerza. Estamos a tiempo y es preferible.