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A mí se me dijo que dejara de hablar con ella, tomé miedo, y pa que la Acacia se enfadara conmigo, pues principié a cortejar a otra moza, que na me importaba …>


Resultado: La justicia contrastó contenidos, el manifiesto y el latente, y decidió liberar sin cargos a Norberto. Pero hay otra pareja de contenidos a analizar: se refieren a la relación Esteban / Rubio (amo y criado).


<Juliana (a Esteban).- No vaya usted a achacármelo a mí también, que yo por mí no hablo. El Rubio ha sido quien me ha dicho que usted no quería verle, porque está muy emperrao en que usted no se ha puesto de su parte con la Justicia, y por eso han soltado a Norberto.


Esteban.- Al Rubio ya le diré yo quien le manda meterse en explicaciones.


El Rubio (a Esteban).- La Juliana es una enreaora. Yo no he bebío … y el dinero que se me cayó era mío, yo no soy ningún ladrón, ni he robao a nadie … Y mi mujer tampoco debe a nadie lo que lleva encima … ¿Verdad usted, señor amo?>


Contenido manifiesto de El Rubio: El dinero del que alardeaba (así lo cuentan quienes le vieron incluso exhibir billetes) era suyo, no lo había robado.


Contenido latente: Ese dinero se lo había dado Esteban como salario de un crimen.


Al final se descubre el pastel analizando la copla:


La del Soto es, evidentemente, Acacia que está en edad de merecer. ¿Alguien la llamaría Malquerida porque la quisieran para casarse con ella un joven tan normal como Faustino o como Norberto?


No, parece claro. Por otra parte, ambos han sido amenazados según el segundo octasílabo: el primero pagó con su vida; gracias a ello, el segundo se libró de la amenaza que ya había sufrido.


Tiene que haber, pues, un tercero que vamos a buscar a través de sus dos contenidos. Veamos los del trío Raimunda, Esteban y Acacia.

La primera sólo tiene un contenido manifiesto: Era una madre cariñosa y una amante esposa. Y no olía para nada los contenidos que latían a su alrededor.


Contenido manifiesto de Esteban: siempre se mostraba discretamente cariñoso con su hijastra, como si quisiera suplir la usencia de su difunto padre.


Su contenido latente era otra cosa: estaba locamente enamorado de la chica, tal como confiaba a El Rubio cuando ambos compartían salidas de caza.


Contenido manifiesto de Acacia: Jamás consintió llamar padre a Esteban, tal como su propia madre hubiera querido. Su actitud parecía lo natural en una chica que echara de menos a su padre muerto.


Su contenido latente resultó una inesperada bomba: no lo podía llamar padre para evitar un incesto evocado; lo llamó Esteban porque estaba enamorada de él, del hombre. Ha sido el único hombre al que he querido, llegó a decir.


Total, que Benavente se adelantó 40 años a Nabocov inventándose el síndrome “Lolita”.


Esteban se presta a entregarse a la justicia como autor intelectual del crimen, según se dice ahora pero, antes que llegue ésta, puede que haya otra muerte. En tal situación de suspense se baja el telón. La obra ha terminado.


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Otras explicaciones que se dan a propósito de la obra. Primero, copio de la biografía que hace la Editorial Plaza Janés de Benavente a modo de Prólogo de toda su obra, lo que se refiere a La Malquerida:


<<De ella ha dicho un crítico: “No es el vulgar drama cotidiano de adulterio rematado en crimen o de amorío rematado en boda. Es drama de raza, drama pasional, intenso, casi tragedia griega, desarrollado en un pueblo de Castilla, a la sombra de una vida rústica y sencilla. El incesto, el terrible soplo infernal del incesto que atraviesa la obra de Esquilo y Sófocles, revive en ese drama de hoy, vivido entre labriegos castellanos”.>>


Por mi parte, voy a intentar clarificar lo que tengo escrito, acudiendo a la cronología de los hechos tal como se describen en los tres actos de la tragedia, globalizando los contenidos de las escenas que componen cada acto. He de añadir que, para mí, la obra es una tragedia y no un drama; de serlo, no habría muertes. Y en la obra, las hay.


La acción transcurre en un lugar castellano donde hay dos especie de pedanías con sendos labradores ricos: Esteban en El Soto y el Tío Eusebio en El Encinar. Ambos son amigos y han compartido intervenciones políticas (elecciones, etc.)


Esteban está casado con la viuda Raimunda que tiene a su hija Acacia viviendo con el nuevo matrimonio.


Bernabé y El Rubio son criados de Esteban.

Para mayor complicación, Bernabea es criada de Raimunda.


Doña Isabel está casada con quien fuera alcalde del pueblo, al presente con mala salud. Tienen a su hija Milagros que es amiga de Acacia.


ACTO 1º

Los dichos, menos los dos criados de Estenan, más Faustino, hijo del Tío Eusebio que, como novio, y con su padre, va a pedir la mano de Acacia para casarse con ella; han asistido en casa de Esteban a una velada con todo tratado, pero festiva y tranquila de la que se despiden todos menos Raimunda, Acacia y Milagros que se quedan en la casa. Va de anochecida con luna nueva y oscuridad total.


Eusebio se marcha con sus criados, pero Esteban se empeña en acompañarlo hasta el arroyo, diciendo a su mujer que no lo espere para cenar.


Acacia y Milagros platican a solas:


<Acacia.-Mira estos pendientes; me los ha regalao … Bueno, Esteban … ahora no está mi madre; mi madre quiere que le llame padre siempre.


Milagros.- Y él bien te quiere.



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