SECTAS

@@@ para los amigos

Me parece estupendo, Mariano, tu ponderado comentario sobre sectas; iré sobre él desentendiéndome de los suicidios que, a fin de cuentas son un ingrediente menor de la cosa. Voy a caricaturizar: puedo imaginarme que todos los habitantes que en España hubo en el siglo XIII se suicidaron, en grupo, o por separado. El resultado sería el mismo para los nosotros de hoy.

Lo que para mí queda claro de tu análisis es que las sectas son una caricatura de las religiones. Algunas caricaturas son tan buenas, que se les parecen mucho. Siempre recordaré una cosa que oí decir a Ramoncín en los tiempos en que estaba de moda comprase una parcela en la sierra, seguramente con la ilusoria pretensión de construirse en ella un chalé. Después se solía demostrar que la parcela servía para que la familia se desplazara hasta ella para merendar allí.

Decía Ramoncín: “La Iglesia vende a sus fieles parcelas en el cielo”. No sé si esto era invención suya o lo sacó de la Biblia. En otros tiempos, en lugar de parcelas se vendían indulgencias a los fieles, de tal manera que, en cuanto sonaban las monedas al caer en la lata petitoria, el alma correspondiente salía del Purgatorio de viaje al cielo.

Mira qué coincidencia más curiosa. Yo tenía pensado adjuntaros la imagen que me ha mandado un amigo, con la bella arquivolta de la iglesia soriana de Sto. Domingo, que tan familiar ha de resultar a Fernando.

No os la cuento porque la tenéis bien detallada en la figura. Agradecido, contesté a mi amigo que me parecía original y bienvenido el título “La Biblia en piedra”. Yo sólo conocía lo de “La Biblia en pasta” (o en verso), y ya con otras intenciones, “La Biblia, el mejor libro de literatura fantástica que se haya escrito” (Borges); “La Biblia, contada a los mayores” (Fernando Díaz Plaja).

Curiosamente, este último libro me lo prestaste tú, Mariano, y yo lo tengo escrito en

https://www.caprichos-ingenieros.com/biblia1.html

Resulta interesante comparar la hermeneutica de la Biblia y la de las sectas.

Os adjunto también mi último artículo sobre el Tangram, por si necesitáis entretenimiento para superar lo que queda de la cuesta de enero. Y volviendo sobre la Biblia, podéis ver lo bien que se lleva el número siete entre chinos y judíos.

NOTAS

-Mi amigo Fernando es abuelo de una nieta que es profesa en el convento de las Clarisas, asociado éste a la iglesia románica de Sto. Domigo (ver figura).

-El escalofriante comentario sobre sectas referido al principio, da estas cifras: entre 1978 y 1998 murieron 1090 personas suicidándose en colectividad: