LA EVOLUCIÓN
Recibo de mi amigo Mariano una hermosa colección de imágenes de insectos relacionada con la evolución de las especies. Y pide mi comentario.
Lo primero que se me ocurre es que los exóticos insectos de la colección son una maravilla, y las fotos, otra. Mis sospechas se han cumplido. Enseguida pensé que el National Geographic Magacine debía de estar detrás, y así es. Robert Clark es un fotógrafo que trabaja para el NG en una serie gráfica titulada Darwin, ¿tenía razón?
R. Clark es un fotógrafo que no carga al hombro con esas enormes cámaras que deben pesar quintales con el pretexto de que así debe ser para obtener buenas fotos. Él, en cambio, usa un móvil para sus fotografías, con resultados sorprendentes. No me atrevo a calificar ese móvil de corriente porque a lo mejor es muy especial: pero no deja de ser un móvil. Y sus insectos también lo son, aunque a veces se paren.
Me imagino que esto del NG es una batalla más en la guerra declarada en los EE.UU entre creacionistas y evolucionistas. En esta guerra yo soy neutral porque para mí, la naturaleza es un misterio, a pesar de lo cual y, vulgar como soy, me intereso por esto de la evolución tal como acredito en http://www.caprichos-ingenieros.com/quien1.html
Mi posición es la de “Que sea lo que Dios quiera” como se decía antes. La guerra a la que acabo de referirme es un reflejo de lo que sucede como misterio tanto en materia de evolución como de religiones. Cada una de éstas resuelve sus misterios a su manera: las religiones, con nuevos misterios y la evolución mediante la acumulación de tiempo (no sé si de cientos o de miles de millones de años; o más.
Hablando de misterios y, ahora que menciono ese adverbio, ¿Cómo pudo imaginarse Darwin que 170 años después de él, fuera a aparecer en Cataluña un tal don Arturo con cabeza en forma de insecto? (Fig. 1).
Fig.1
Fijándome en el tiempo y otros misterios, reparo en una coccinella (Fig. 2) que no es la familiar septempunctata que yo estudié con mi querido profesor Alejandro Navarro cuando nos sacaba al campo con pinzas, y lupas especiales para contar artejos, con ocasión de mi sexto de Bachillerato.
Ésta del NG sólo tiene seis puntos así que no sé si tendré que esperar unos cuantos millones de años para ver si la evolución le pone el punto que le falta, y le cambia los colores y todo lo necesario. Como a mí me quedan pocas legislaturas de las cortas, tú, Mariano, ten paciencia que yo te avisaré a tiempo desde la eternidad. Todos tenemos que ser pacientes con el tiempo como nos enseña tu tocayo el de Santiago de Compostela, que usando de paciencia lo mismo llega a presidente de Diputación que del Gobierno.
Fig.2
Fig.4
Fig.3